A finales de los años 70, Audi empezó a realizar los primeros ensayos de su sistema de tracción a las cuatro ruedas. En las pistas heladas de Finlandia, los técnicos pudieron comprobar que este sistema exclusivo ofrecía más agarre y seguridad, por lo que muy pronto empezó a ser incorporado en los vehículos de producción.
El Audi quattro, presentado en el año 1980, fue el primer vehículo de la marca que incorporaba esta tracción integral. Aquel icónico coupé cosechó grandes éxitos en competición, que derivaron en un esperanzador ritmo de ventas.
Más de cuatro décadas después, la tracción quattro es la gran seña de identidad de Audi. De hecho, en la actualidad, todos los vehículos de la marca cuentan con alguna versión equipada con el sistema quattro, desde el pequeño A1 hasta la berlina A8, pasando por los deportivos y la gama Q, orientada a los modelos crossover.
Este éxito de la tracción Audi quattro queda demostrado con el interés de los clientes por este sistema, el mejor valorado del mercado tanto por su eficacia como por su fiabilidad. Y es que Audi, a lo largo de 2017, ha sido líder de ventas en España en coches de tracción a las cuatro ruedas. De las matriculaciones totales del año, las ventas de vehículos Audi quattro han representado un 22,2% del total, 11.821 vehículos.
El sistema de tracción quattro aporta seguridad y deportividad, y estos son algunos de los modelos de la gama actual que lo incorporan:
- Audi Q5: con motores gasolina y diésel que van desde los 163 hasta los 354 CV, prácticamente la totalidad de acabados del Audi Q5 cuentan con el sistema de tracción quattro.
- Audi Q3: en el caso del SUV compacto de la marca, la tracción quattro se asocia a los motores 2.0 TDI, de 150 y 184 CV, y 2.0 TFSI, de 180 y 220 CV, con cambio automático S tronic de 7 velocidades.
- Audi Q7: todas las versiones del buque insignia de la gama SUV de Audi cuentan con la tracción quattro, lo que incluye el híbrido enchufable Q7 e-tron y el dinámico SQ7 con 435 CV de potencia.
- Audi A5: las tres carrocerías de esta gama, Coupé, Sportback y Cabrio, pueden incorporar la tracción quattro, tanto con motores gasolina como diésel, así como las versiones más deportivas S5, de 354 CV, y RS 5, de 450 CV.
La última evolución de la tracción integral de Audi se denomina quattro ultra e incorpora un control inteligente, capaz de anticiparse a las necesidades gracias a los sensores con los que cuenta. Los datos de la dinámica de conducción, las condiciones de la carretera y el comportamiento del conductor, se analizan cada 10 milisegundos con el objetivo de lograr la máxima eficiencia sin perjudicar la dinámica de conducción. Además, quattro ultra consigue reducir el consumo de combustible en aproximadamente 0,3 litros cada 100 kilómetros, en comparación con los sistemas de tracción total convencionales.